jueves, 21 de noviembre de 2019

El noveno círculo











                                                                DANTE ALIGHIERI


La “Divina Comedia” título que da a la obra el poeta Petrarca, pues Dante sólo llamó “Comedia” a su poema de 100 cantos, se compone de un canto introductorio y tres capítulos: Infierno, Purgatorio y Paraíso. Cada capítulo tiene 33 cantos que sumados al introductorio nos dan  los 100. de que consta la obra poética. 

Dante Alighieri, poeta italiano del siglo XIV, se encuentra perdido en medio de una selva oscura. El alma de Virgilio, el poeta latino, acude en su auxilio y le hace saber que su amada Beatriz le ha pedido que lo lleve hasta los nueve círculos del paraíso. Para eso, acompañado por el poeta Virgilio, deberá pasar primero por los nueve círculos  del infierno y los nueve del purgatorio.

Esto nos dice la obra clásica del siglo XIV, pero, ¿qué habría ocurrido si Dante y Beatriz, jóvenes de 33 años, ya instalados en el siglo XXI en un lugar de vacaciones, paraíso para turistas, marcan el número 9 imposible en un ascensor de un edificio de sólo cinco pisos?

                                                  *

Atardecía. La brisa marina nos recibió al salir del autobús y la caricia salada nos transportó a un mundo mejor. Agosto ya va dejando mordiscos de nada entre las palmeras. Veo que el fuerte poniente ha zangoloteado los árboles del paseo marítimo inclinándolos hacia el este.  Llegamos al pequeño hotel de solo cinco plantas. El recepcionista, Ugolino della Gherardesca, así  lo indicaba en su pecho una metálica placa negra, nos recibió amablemente: ¡Signora Portinari, Signor Alighieri, benvenutti al Paradiso!

Luego nos indicó que no tomáramos el primer ascensor; pero lo hicimos. Era semejante a una amplia celda que olía a azufre. Íbamos a la habitación 33 del piso tercero, pero el elevador nos indicaba hasta nueve posibilidades, un imposible ascenso al noveno piso. Contra toda lógica, marqué el mágico 9, el cielo no puede esperar. Inclinados al placer de equivocarnos, llegamos a enamorarnos de la primera piedra con la que siempre tropezamos.

 Una semana después en el metálico encierro azul, yo, Beatriz, la dama florentina, hija de Folco Portinari, me sorprendí tenebrescente, cambiando del blanco al negro, y mirando hacia el siniestro flanco. 

Perdidos en no se sabe bien qué dimensión, confusos en el amarillento azufre del noveno círculo en el que yo nunca debí estar, sin libertad de movimiento, quietos en medio de la nada, se sucedía el tiempo a sí mismo como un río aparentemente inmóvil  avanzando a ningún sitio.

 La vida solo es una triste comedia. Somos hojas de otoño, le dije, y se tiñó de rojo la camisa blanca del orgulloso güelfo antes de desplomarse. ¡Dante Alighieri, mi fingidor poeta! Debo emprender un viaje desconocido para mí, pensé, y se extendió  el olvido como la luz difusa de una mariposa de aceite.

BEATRICE






DANTE ALIGHIERI



28 comentarios:

  1. Debo emprender un viaje desconocido para mí, pensé, y se extendió el olvido como la luz difusa de una mariposa de aceite.

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  2. Quietos en medio de la nada, se sucedía el tiempo a sí mismo como un río aparentemente inmóvil avanzando a ningún sitio.

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  3. El poema de Ungaretti ‘noi siamo come d´autumno sugli alberi le floglie’, es decir, nosotros estamos como están las hojas sobre los árboles en otoño.

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  5. Mariposa de aceite : Pequeña mecha afirmada en un disco flotante y que, encendida en su recipiente con aceite, se pone por devoción ante una imagen o se usa para tener luz de noche. Vieja costumbre en la noche del Día de Difuntos.

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  6. El lector debe leer el relato como una perfecta noticia:
    ¿Qué? ¿Quién? ¿Dónde? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Por qué?

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  7. Noveno círculo y amarillento azufre nos llevan al Infierno en el que Dante debió estar acompañado del poeta Virgilio, nunca de Beatriz. Beatriz debía estar en el noveno círculo del Paraíso. De ahí, ‘ confusos’.

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  8. Mi fingidor poeta alude al poeta portugués Fernando Pessoa.

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  9. En “se tiñó de rojo la camisa blanca del orgulloso güelfo” se hace alusión a la muerte violenta de Dante, miembro de los güelfos blancos en la ciudad de Firenze.

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  10. La hipálage del adjetivo blanca se refiere a los güelfos blancos.

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  11. La Divina Comedia queda aludida en “La vida solo es una triste comedia”.

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  12. En “Somos hojas de otoño” late la presencia de Giuseppe Ungaretti, poeta italiano del siglo XIX – XX (1888-1970), representante poético del hermetismo.

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  13. Dos símiles originales completan el microrrelato : tiempo = río aparentemente inmóvil, y olvido= luz difusa de una mariposa de aceite.

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  14. Guadalete: El río del olvido= El río Leteo, que conduce a los infiernos. Anticipación del final.

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  15. ¡Signora Portinari, Signor Alighieri, benvenutti al Paradiso!

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  16. La vida solo es una triste comedia. Somos hojas de otoño, le dije, y se tiñó de rojo la camisa blanca del orgulloso güelfo antes de desplomarse. ¡Dante Alighieri, mi fingidor poeta!

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  17. Contra toda lógica, marqué el mágico 9, el cielo no puede esperar. Inclinados al placer de equivocarnos, llegamos a enamorarnos de la primera piedra con la que siempre tropezamos.

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  18. Una semana después en el metálico encierro azul, yo, Beatriz, la dama florentina, hija de Folco Portinari, me sorprendí tenebrescente, cambiando del blanco al negro, y mirando hacia el siniestro flanco.

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  19. Veo que el fuerte poniente ha zangoloteado los árboles del paseo marítimo inclinándolos hacia el este.

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  20. El recepcionista, Ugolino della Gherardesca, así lo indicaba en su pecho una metálica placa negra, nos recibió amablemente: ¡Signora Portinari, Signor Alighieri, benvenutti al Paradiso!

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  21. Atardecía. La brisa marina nos recibió al salir del autobús y la caricia salada nos transportó a un mundo mejor. Agosto ya va dejando mordiscos de nada entre las palmeras.

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  22. Atardecía. La brisa marina nos recibió al salir del autobús y la caricia salada nos transportó a un mundo mejor. Agosto ya va dejando mordiscos de nada entre las palmeras. Veo que el fuerte poniente ha zangoloteado los árboles del paseo marítimo inclinándolos hacia el este.

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  23. Contra toda lógica, marqué el mágico 9, el cielo no puede esperar.

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  24. Inclinados al placer de equivocarnos, llegamos a enamorarnos de la piedra con la que siempre tropezamos.

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  25. Al noventayochista Azorín le gustaba cambiar las viejas historias literarias consagradas procurando un final más amable que el que tenía la original.Así, por ejemplo, realiza el cambio del trágico final de Calisto y Melibea por la historia de una feliz pareja burguesa que juega con su hija en los jardines de la casa.

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  26. Una semana después en el metálico encierro azul, yo, Beatriz, la dama florentina, hija de Folco Portinari, me sorprendí tenebrescente, cambiando del blanco al negro, y mirando hacia el siniestro flanco.

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  27. Contra toda lógica, marqué el mágico 9, el cielo no puede esperar.

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  28. La vida es un imposible ascenso al noveno piso.

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